¿Cómo afecta el estrés a nuestra piel?

 

El estrés, el gran enemigo de nuestra piel volviéndola seca, rugosa, tirante y sobre todo cubréndola con los temidos granitos que tanto nos molestan.

A todas nos ha pasado que llega un día especial, como nuestra boda, un evento importante, primer día de trabajo en que que queremos vernos radientes y nos levantamos con ese temido grano en la zona más visible de nuestra cara, y nos hemos querido volver a acostar para ver si desaparecía. Pues bien, este tipo de incidencias ocurren en muchas ocasiones por el estrés causado debido a diversas circustancias de la vida que generan que nuestra piel reaccione causándonos ese malestrar.

Pero el estrés va mucho más alla de un simple granito, ya que puede provocar verdaderos problemas dermatológicos si nuestro nivel de cortisol permanece elevado durante mucho tiempo. Problemas como rosacea, dermatitis, psoriasis , acné son algunos de ellos, y por supuesto deben ser tratados por un dermatólogo.

Pero sí podemos prevenir la aparición en cierto modo mediante cuatro pasos muy sencillos:

1. Protección solar, protección solar, protección solar, y mil veces protección solar del 50. Nuestra piel tiene memoria, y cuenta cada una de las horas de sol que hemos tomado, así que siempre es recomedable su uso en todas las estaciones del año y sobre todo en verano, por lo que en esta estación hay que aplicarlo varias veces al día siempre y cuando estemos expuestos al sol.

2. Hidratación, nuestra piel necesita mucha mucha hidratación no solo usando cremas hidratantes que restauran el agua de nuestra piel, si no también bebiendo los dos litros de agua recomendados. Si nos mantenemos hidratados, los resultados en nuestra piel serán visibles en muy poco tiempo, y evitaremos así un gran gasto en productos. Para pieles dehidratadas nada mejor que Maui, nuestra crema de Biocolágeno y manteca de karité.

3. Descansa, duerme bien,  manteniendo una rutina de sueño diaria, acostándote y levantándote a la misma hora. Pero muchas de nosotras, somos madres y ahí sí que no puedo aconsejar un buen descanso puesto que ya no depende de nosotras, por lo que una buena rutina facial con un cortono de ojos de vitamina C como Hanna, un corrector y un café no podrán faltar en vuestro día.

4. Una dieta equilibrada siempre se recomienda para una piel radiante, a base de muchas frutas y verduras que nos aporten vitaminas, pero si ésto lo complementamos con una buena crema con vitamina C como Valentina pues mucho mejor jeje.

El estrés es un gran enemigo para la piel, y para todo nuestro organismo. El día a día, el trabajo, los hijos, el poco descanso y demás problemas cotidianos hacen que no podamos tener un cuidado y un descanso adecuados por lo que una ayudita nunca viene de más .